A todos nos gustan las palomitas de maíz o pochoclos o pororó -depende la región se le conoce con un nombre distinto-, pero como es que un grano tan pequeño de maíz pasa a ser una pieza blanca, explotada y deliciosa para acompañar una película en el cine o en casa.
En realidad todo se debe al agua. El maíz contiene unas minúsculas cantidades de agua, esta al calentarse, hierve y provoca una gran presión dentro de la semilla. Al convertirse en vapor de agua, la presión es tanta que simplemente hace que la semilla explote, la fuerza es tal que las capas interiores de la semilla pasan a ser la capas exteriores.
No hay comentarios:
Publicar un comentario